Fuente: Citta Nuova por Sara Fornaro 11 de julio de 2025
Los días 28 y 29 de julio tendrá lugar el Jubileo de los misioneros digitales e influencers católicos: una oportunidad para que la Iglesia lleve a Cristo al mundo, según el secretario del Dicasterio vaticano para la Comunicación, monseñor Ruiz.
«El objetivo de este jubileo es doble. Por un lado, ‘valorizar’ a los misioneros digitales e influencers católicos, que durante años no han sido reconocidos, abrazarles y decirles: la Iglesia los ha descubierto, los quiere, los apoya y los acompaña. Por tanto, darles «mimos» espirituales. Por otra parte, el Jubileo sirve para decir a los obispos y a toda la Iglesia: abramos los ojos porque tenemos una fuerza misionera fuerte y hermosa, que debemos desarrollar». Monseñor Lucio Adrián Ruiz, secretario del Dicasterio vaticano para la Comunicación, habló de la importancia del próximo Jubileo de los misioneros digitales y de los influencers católicos (28 y 29 de julio) en la reunión mensual online del grupo Comunicación y Sinodalidad, inspirado en la red internacional NetOne, en el que participan periodistas y comunicadores de diversos periódicos, así como estudiosos y estudiantes de comunicación.
Don Cosimo Schena, el sacerdote italiano más seguido en Instagram, Francesca Parisi, profesora y misionera digital de 31 años, así como Michael Mattarucco, trabajador de 24 años y batería del grupo Vita Nuova, aportaron sus testimonios al encuentro.
Por supuesto, añadió Ruiz, hay muchas cosas «que desarrollar, que ayudar, que formar, que corregir, pero lo más importante es que para poder hacer todo esto, tenemos que estar ahí. Y por eso este Jubileo quiere decir a los obispos, a la Iglesia: cuidémosles, porque están amando, están llevando a Jesús, caminemos todos juntos’. Este Jubileo es uno de los frutos del Sínodo, en el que se pidió a la Iglesia que reconozca y acompañe a los misioneros. Por idea del Papa Francisco, se puso en marcha un estudio, en el que participaron los dicasterios de Comunicación, Cultura y la Secretaría General del Sínodo de los Obispos, cuyos resultados -tras miles de consultas- se presentarán próximamente.
En el contexto de una Iglesia misionera que, como dijo el Papa Francisco, quiere llegar a todos, a todos, monseñor Ruiz cuenta que misioneros digitales e influencers católicos habían pedido tener su propio Jubileo. Un proyecto presentado a Bergoglio y aprobado por él, que tendrá lugar los días 28 y 29 de julio, cerca del Jubileo de los Jóvenes, que en cambio se celebrará del 28 de julio al 3 de agosto.
Serán cerca de mil los misioneros digitales e influencers católicos que acudirán a Roma desde distintas partes del mundo. Para monseñor Ruiz, será una oportunidad para orar, pensar, dialogar y madurar la presencia de la Iglesia misionera en los entornos digitales. El objetivo es acompañar, reconocer, formar y caminar junto a las personas que navegan cada día por la Red.
El Jubileo dará la oportunidad, explica Ruiz, de descubrir una nueva página misionera de la Iglesia. No se tratará de aprender a hacer posts en las redes sociales, sino de pensar la misión digital como una nueva forma de encontrar a la gente, de encontrar la carne sufriente de Cristo en la Red, para llevar, en su lenguaje, en su tiempo, en su dinámica, la palabra de Jesús, y luego acompañarles a la Iglesia ‘presencial’, para que continúe la obra.
Con este tipo de eventos, añade monseñor Ruiz, se pretende que la gente entienda que en el mundo digital «se puede hacer misión de verdad, porque se puede amar de verdad. Se sale al encuentro de los demás, para hablar su idioma y luego llevarlos a casa, a la casa del Padre, para que la comunidad continúe el proceso de evangelización».
Con posts, vídeos, mensajes, los misioneros digitales y los influencers católicos «se cruzan en el camino de muchas personas que quizás nunca habrían pensado en abrir un Evangelio o entrar en una iglesia. Estas personas pueden encontrar una imagen, una palabra, una frase que les impacte y que sea la forma de que Jesús entre en esa vida, en ese corazón. Una persona totalmente alejada de la Iglesia, no religiosa, escuchando unas palabras en un momento especial de su vida, puede dejar entrar a Jesús e incluso se pueden salvar vidas. Hay muchísimas experiencias de esto».
Al fin y al cabo, subraya Ruiz, al principio eran tres misioneros digitales y hoy son más de 5.000, y quieren encontrar un sentido a su misión para poder ayudar a la gente. «Y esto es lo que tenemos que ser capaces de desarrollar en la Iglesia: ayudarles a hacer una nueva misión».